En estos últimos días se han confluido 2 hechos que siendo en países diferentes son ejemplos vivos de que el poder cargado para un lado es malo, sea cual sea el lado, me refiero obviamente al cierre de RCTV (Radio Caracas Televisión) por parte de Hugo Chávez y de la revisión de constitucionalidad por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Ley de Radio y Televisión (Ley Televisa) la cual fue aprobada de manera vergonzosa por todos los diputados y la mayoría de senadores.
En los 2 casos es el exceso de poder es los marcan por un lado el exceso del estado venezolano en contra de un televisora (la cual no se si sea buena o sea mala su programación) a la cual no le renovaron su concesión de servicio después de 53 años creo, si de verdad está televisora apoyo el intento de golpe de estado a Chavez debería haber sido en su momento la aplicación, no que ahora más bien parece una manera de acallar voces críticas, que aunque sean de derecha, su libertad de expresión siempre debe ser garantizada. En México ocurre lo contrario las televisoras son las que mandan y ahora hasta impusieron una ley la cual les garantiza que se queden a perpetuidad con el espacio radioeléctrico sin darle al estado ni un cinco. Por eso gritan a loas 4 vientos que el hecho de que consideren dicha ley anticonstitucional es como lo que ocurre e Venezuela, cosa que es de lo más falso, el Estado mexicano -aunque esté comandado por mierdas como fecal- debe tener garantizar por un lado que los medios de comunicación puedan hacer negocio pero por otro que estos paguen sus impuestos y no se quieran erigir como los dueños de este país. Por eso ni tanto que queme al santo ni tanto que no lo alumbre...
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